El Bulldog Francés Fluffy no es un perro excesivamente activo, pero sí necesita paseos diarios y algo de juego para mantenerse en forma. Disfruta de ratos tranquilos, pero también se motiva con actividades que involucren a su familia. No tolera bien el calor ni el ejercicio intenso en altas temperaturas, por lo que conviene evitar esfuerzos en climas calurosos.
El Fluffy requiere cuidados similares a los del bulldog francés estándar, pero con especial atención al pelaje. Es importante mantener limpias sus arrugas faciales y orejas, controlar su peso y evitar esfuerzos físicos excesivos. Por su estructura braquicéfala, hay que tener precaución con el calor y las altas temperaturas. Las revisiones veterinarias regulares son clave para detectar a tiempo posibles problemas respiratorios o dermatológicos.
El rasgo distintivo del Bulldog Francés Fluffy es su pelaje largo, suave y sedoso, que requiere un cepillado frecuente para evitar enredos y mantener su brillo. Aunque no es muy difícil de mantener, sí necesita más atención que el bulldog francés de pelo corto. Es recomendable usar champús suaves y secar bien el pelaje tras el baño. Su aspecto esponjoso y elegante es uno de sus mayores encantos.
Según su tamaño y peso puede pesar entre 5kg y 14kg
Entre 28 y 33 cm.
El Fluffy es una raza que puede llegar a vivir de 10 a 14 años.
Mascotas Bravo es un criadero canino con núcleo zoológico autorizado, licencia de apertura y Afijo autorizado por la Real Sociedad Canina de España (RSCE) y la Federación Cinológica Internacional.
